- - Se
recomienda regar las plantas de exterior por la mañana o por la noche.
- - Para
saber cuándo necesitan tus plantas agua, debes introducir un palo o un poco tu
dedo y así comprobarás si la tierra está húmeda, es el mejor termómetro para la
humedad. Verás también que si la tierra está oscura quiere decir que está
húmeda, pero si la ves clara es que está seca.
- - El
mejor método de riego es el “del plato”, que consiste en poner la maceta sobre
un plato con agua durante un rato y una vez haya absorbido un poco de agua,
retirarlo.
- - A
las plantas de interior no les gusta nada las corrientes. ¡EVÍTALAS!
- - No
colocar nunca la planta al lado de la calefacción o chimeneas.
- - Se
recomienda regar las plantas con el agua reposada del día anterior, es decir,
dejar agua a la noche para regar al día siguiente la planta, así evitaremos el
exceso de cal que tiene el agua y puede dañar las plantas.
- - Cuando
una planta está encharcada porque le has echado mucha agua, puedes recuperarla
sacando el cepellón y envolviéndolo en varias capas de papel de cocina
absorbente. Déjalo envuelto durante 24 horas y después vuelve a meter la planta en la maceta y no riegues
en varios días.
- - A
las plantas que tengas con flor no les vaporices nunca, ya que se estropearían
enseguida.